La obra narra la historia de una joven estudiante de medicina (Rebeca) que se entregó en los brazos de su novio. Sin  saberlo, quedó embarazada; pero en vez de hablar con sus padres, decidió contarle a su mejor amiga (Victoria) lo que le estaba aconteciendo, por miedo a su madrastra (Mercedes) que la amenazó con echarla de la casa. Al darle larga a la situación, creyó que la mejor idea era decirle a su novio (Carlos) la verdad. Más, su decisión le hizo experimentar en carne propia la traición, la incomprensión de una madrastra con un pasado oscuro y el trágico accidente que por su culpa sufrió la única persona que en esos momentos de angustia podía socorrerla: su padre. Pero, a pesar de todo, la vida puede dar una segunda oportunidad para volver a empezar.

Pedí este libro a la editorial Chiado porque me llamaba muchísimo la atención sus sinopsis, la cual dice bastante sobre la historia y aunque eso no me gusta, me dio un poco de aliciente para decidirme a querer leerlo ya que supuse que sería una historia dramática y profunda de esas que te hacen reflexionar sobre la vida. La portada también me gustó y ahora me parece muy acorde a la historia.

Al principio comencé la lectura con un ritmo muy ameno ya que desde el primer momento entra de lleno en la historia, sin rellenos ni largas introducciones pero a medida que fui avanzando en ella empezó a decaer porque a pesar de que la narración es más dialogada que narrada hay partes que suceden muy precipitadamente y otras demasiado lentas.

La trama es bastante común, puede que un poco cliché y dramática, pero también muy entretenida y al final aunque no te guste mucho como se narran las escenas sigues leyendo porque despierta en ti la curiosidad por descubrir el desenlace de todo.

La historia gira en torno a Rebeca, quien se nos presenta embarazada de su novio Carlos, el cual vemos que no aprecia a Rebeca y que además no se hace responsable del embarazo.
Rebeca sabe que su embarazo tampoco será bien recibido por su madre, quien ya le advirtió con antelación que si quedaba embarazada la echaría de casa. Por lo que nuestra protagonista se encuentra en una delicada y difícil situación, tras lo cual decide no contarle a sus padres sobre su inesperado embarazo. A partir de ahí, Rebeca se verá envuelta en una rutina de presión, mentiras, y miedos que la atormentaran hasta que al final le desvele su secreto a sus padres. Pero, ¿Que pasará cuando se enteren de las mentiras de Rebeca y de su estado? ¿Qué pasará si gracias al impacto de esa revelación sucede algo que afecta a la vida y salud de su padre? ¿Conseguirá aclarar la situación y relación con sus padres? ¿Conseguirá el apoyo que necesita para poder tener a su bebé?

Bueno, no voy a contar mucho más de la historia ya que la sinopsis cuenta bastantes cosas y siempre es mejor que descubráis vosotros mismo lo que hay en ello. Solo os diré que además de la historia de Rebeca también descubriremos la vida de su madre Mercedes, de su amiga Victoria, de Carlos... es decir, no solo se centra en Rebeca, también conoceremos en más profundidad sobre los demás personajes que aparecen en el libro.

Carlos, el exnovio de Rebeca y padre de su hijo, es un personaje ruin, machista, mujeriego y todos los calificativos negativos que se te puedan ocurrir. Es un personaje realmente odioso y no llego a entender como un chico de la actualidad puede tener esos pensamientos tan inhumanos.

Rebeca me ha dado bastante lastima durante todo el libro pero tampoco me ha terminado de gustar. Su actitud tan pánfila, inconsciente e infantil ha causado gran parte de todo el drama.

Mercedes, madrastra de Rebeca, es un personaje amargado por sucesos de su pasado y su actitud tan estricta y carente de sentimientos nos hará no cogerle afecto.

El narrador se alterna entre varios personajes, es decir, conoceremos la historia no solo a través de la protagonista sino también de sus padres, de su amiga, de Carlos, de su amigo... esto siempre me parece fantástico para conocer mejor a los personajes y sus situaciones, sin embargo, en esta ocasión ha sido un poco confuso ya que me he liado un par de veces debido a que los cambios de narradores se producían sin previo aviso y tampoco especifican al principio el nombre del narrador que va a narrar por lo que no nos queda más remedio que intuirlo y averiguarlo a través del contexto y por eso a veces me ha resultado difícil enterarme de quien era el narrador y he tenido que parar y releer varias veces para comprenderlo. Entre esto y el estilo de narración me ha costado un poco conectar del todo con la historia.

El final es bastante bonito a pesar de todo, y creo que es muy adecuado después de tantos conflictos. La vida puede cambiar inesperadamente, para bien o para mal, pero hay que hacer frente, aprender de los errores y tener esperanza porque siempre hay nuevas oportunidades.
El mensaje que se intenta transmitir a través de esta historia es muy interesante y opino que es un tema sobre el que todos deberíamos de reflexionar más ya que nuestras acciones y decisiones traen consecuencias que a veces pueden ser negativas y muy perjudiciales no solo para nosotros sino también para más personas.

Para mi lo mejor del libro ha sido el significado de la historia y el mensaje que nos otorga una gran concienciación así que os lo recomiendo porque os llevareis un aprendizaje muy especial.

En resumen, Cuando quedan cicatrices, es un libro emotivo con el que soltarás alguna lagrimilla y también alguna sonrisa.
Toca bastantes temas importantes como las relaciones familiares, la inmadurez y sus consecuencias, las mentiras, la tradición y el desamor, la adicción, los traumas... y aunque hay bastante drama no todo es así, también hay amor, amistad, familia, aprendizaje, maduración, superación, nuevas oportunidades...

¡Gracias a la editorial por el ejemplar!